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02 octubre 2022

elrow closing party: el surrealismo más divertido

Un evento en Ibiza es mucho más que una programación musical, es una experiencia completa que estimule todos tus sentidos. Si hay una fiesta que lleve esto hasta el extremo, esa es elrow, la propuesta más colorida, más barroca y más ambiciosa de la isla. Tras una temporada exitosa llena de momentos inolvidables, el pasado sábado celebró su closing party y lo hizo como solo elrow puede hacerlo, con una puesta en escena que nos voló la cabeza y que nos demostró que otra forma de diseñar fiestas es posible.

Como muchos sabréis cada evento de elrow es diferente, un concepto diferente. Para este closing nos encontramos con su lado más artístico y vanguardista: Delusionville. Un concepto, que nace de la corriente artística POPaganda, creado por el artista estadounidense contemporáneo Ron English Art. Entrar en las dos salas de Amnesia era una experiencia surrealista, a cada paso te encontrabas paisajes metamórficos junto a animales antropomórficos, seres alucinantes que alimentaban tu imaginación y te trasladaban a un mundo de ensueño. Era como entrar a un museo de arte moderno repleto de sorpresas y de pequeños detalles que te dejaban con la boca abierta.

En un contexto como éste la música jugó un papel importante, ya que se entrelazaba con la decoración y las performances de una forma natural. Los artistas que participaron se vieron influenciados por esa atmósfera y nos regalaron actuaciones de un nivel espectacular. En la Main Room, rebautizada como elrow City, Kölsch demostró una vez más por qué su sonido encaja perfectamente con la propuesta de elrow, creando ritmos hipnóticos aderezados con su personalidad. Desarrolló una sesión maratoniana que en ningún momento se sintió pesada, creando una narrativa musical desde la primera hasta la última nota.   

En la Terraza cada uno de los artistas que participaron dejó su sello. Eats Everything nos cautivó con su solvencia, Bastian Bux con su energía y Tini Gessler con su incuestionable magnetismo. Pero como no podía ser de otra manera, el DJ que marcó la diferencia fue la leyenda Fatboy Slim. Un pura sangre de la electrónica que conoce como nadie los resortes de la pista de baile y que logró que todos y cada uno de los que estábamos frente a la cabina de la Terraza no dejáramos de bailar en ningún momento. 

Recopilar todos los momentos que vivimos en el closing party de elrow es una tarea casi imposible, porque los estímulos y la calidad de lo vivido nos sobrecogieron. No hay mejor manera de poner punto y final a una temporada, no es posible dejar un mejor sabor de boca como el que nos dejó elrow. Por eso no vemos la hora de volver a reencontrarnos con sus alocadas propuestas en su único y verdadero hogar… Amnesia Ibiza.